Pirotecnia: los riesgos antes de la verbena
Redacción Protección Laboral21/06/2016
Los que mañana celebréis la verbena de San Juan probablemente ya lo tengáis todo a punto, petardos incluidos. Aprovechando estas fechas, hemos preparado un post sobre los riesgos de la industria pirotécnica y hemos dado con uno de los protocolos más extensos en materias de PRL. A continuación lo presentaremos de manera resumida para finalmente compartir los enlaces de interés para una información más detallada.
Para empezar, como en todas las industrias donde existan riesgos (y aquí estamos hablando de explosivos), la empresa que trabaje con material pirotécnico deberá contar con los métodos de prevención necesarios por ley. Así lo estipula nuestra legislación en PRL.
El riesgo de explosiones, al tratarse de material extremadamente inflamable (sobre todo si entran en contacto 2 sustancias incompatibles), es el primero que nos viene a la cabeza, por supuesto. Pero existen muchos más, relacionados con la dureza del trabajo de manipulación de estos materiales. Por ejemplo, el polvo que se desprende al trabajar en la industria pirotécnica también es peligroso al entrar en contacto con nuestros ojos o al respirarlo. De la misma manera, los ruidos producidos por las prensas también son demasiado fuertes para nuestros oídos. Los riesgos ergonómicos tampoco se escapan de esta industria, ya que se acostumbra a trabajar con posiciones repetitivas que pueden llevar a lesiones y a fatiga física y mental. Además, al utilizar prensas también existe el riesgo de quedar atrapado entre objetos.
Una parte vital de la prevención en la industria pirotécnica es la limpieza. Se aconseja mantener un orden y una frecuencia de limpieza muy elevados. Para ello, se utilizarán distintos métodos según la superficie y los materiales que toque limpiar. Los métodos utilizados serán el barrido en seco (en el caso de que la producción de polvo no provoque riesgos), el barrido húmedo (el más aconsejable en casos de polvo, aunque no debe utilizarse si el polvo es de aluminio o magnesio), arrastre por agua y aspiración (con aparato especial para estos casos).
Obviamente, otro punto importantísimo, que no haría falta ni mencionar, es no fumar en la instalación. Pero además, tampoco podremos entrar en el espacio de trabajo ningún elemento que pueda causar llamas: ni cerillas ni mecheros.
Respecto al mantenimiento de las máquinas, los operadores deberán conocer “al dedillo” su funcionamiento y saber detectar cualquier anomalía que pueda ser causante de riesgos. Si así pasa, se debe informar de ello y no utilizar la máquina hasta asegurarse de que esté arreglada. El mantenimiento -que incluye limpieza, revisión y lubricación en el caso de que se requiera- debe hacerse a máquina parada y señalizar como es debido para que nadie ponga las máquinas en marcha.
Los EPI no pueden faltar: para combatir el polvo necesitaremos mascarillas, tapones y auriculares para el ruido, calzado de suela conductora (según qué caso con punteras metálicas), ropa de fibra natural, guantes antiestáticos y, por supuesto, gafas de protección. Así nos podremos proteger correctamente de la electricidad estática y de la exposición a sustancias nocivas.
En cuanto a la manipulación y almacenaje deberán tenerse en cuenta diversas normas como separar correctamente los materiales incompatibles entre ellos, no arrastrar los embalajes y moverlos con precaución, recoger inmediatamente cualquier material que caiga al suelo, manipular sólo las cantidades necesarias de sustancias y un largo etcétera.
También será muy importante que los operarios tengan formación en primeros auxilios por si, aun prevenidos, hubiera algún accidente. Asimismo la empresa debe contar con un protocolo en caso de incendio que todos los trabajadores deberán conocer para saber cómo evacuar la zona sin esperar a una orden directa e in situ de su superior.
Como veis, lo que algunos rápidamente consumimos por entretenimiento lleva un trabajo de prevención muy exhaustivo. Y lo que hemos plasmado en este post es solo la punta del iceberg. Por eso, compartimos documentación muy interesante sobre protocolos en la industria pirotécnica. Nosotros nos despedimos y os deseamos una feliz verbena (con mucha precaución) a quienes la celebréis.
Recomendaciones básicas en PRL Sector de la Pirotecnia - Fundación de la Comunidad Valenciana para la Prevención de Riesgos Laborales
Seguridad en Pirotecnia y Cartuchería - Fueyo editores
Prevención de Riesgos Laborales: Pirotecnia
Para empezar, como en todas las industrias donde existan riesgos (y aquí estamos hablando de explosivos), la empresa que trabaje con material pirotécnico deberá contar con los métodos de prevención necesarios por ley. Así lo estipula nuestra legislación en PRL.
Los riesgos de “jugar con fuego”
El riesgo de explosiones, al tratarse de material extremadamente inflamable (sobre todo si entran en contacto 2 sustancias incompatibles), es el primero que nos viene a la cabeza, por supuesto. Pero existen muchos más, relacionados con la dureza del trabajo de manipulación de estos materiales. Por ejemplo, el polvo que se desprende al trabajar en la industria pirotécnica también es peligroso al entrar en contacto con nuestros ojos o al respirarlo. De la misma manera, los ruidos producidos por las prensas también son demasiado fuertes para nuestros oídos. Los riesgos ergonómicos tampoco se escapan de esta industria, ya que se acostumbra a trabajar con posiciones repetitivas que pueden llevar a lesiones y a fatiga física y mental. Además, al utilizar prensas también existe el riesgo de quedar atrapado entre objetos.
¿Cómo se previenen?
Una parte vital de la prevención en la industria pirotécnica es la limpieza. Se aconseja mantener un orden y una frecuencia de limpieza muy elevados. Para ello, se utilizarán distintos métodos según la superficie y los materiales que toque limpiar. Los métodos utilizados serán el barrido en seco (en el caso de que la producción de polvo no provoque riesgos), el barrido húmedo (el más aconsejable en casos de polvo, aunque no debe utilizarse si el polvo es de aluminio o magnesio), arrastre por agua y aspiración (con aparato especial para estos casos).
Obviamente, otro punto importantísimo, que no haría falta ni mencionar, es no fumar en la instalación. Pero además, tampoco podremos entrar en el espacio de trabajo ningún elemento que pueda causar llamas: ni cerillas ni mecheros.
Respecto al mantenimiento de las máquinas, los operadores deberán conocer “al dedillo” su funcionamiento y saber detectar cualquier anomalía que pueda ser causante de riesgos. Si así pasa, se debe informar de ello y no utilizar la máquina hasta asegurarse de que esté arreglada. El mantenimiento -que incluye limpieza, revisión y lubricación en el caso de que se requiera- debe hacerse a máquina parada y señalizar como es debido para que nadie ponga las máquinas en marcha.
Los EPI no pueden faltar: para combatir el polvo necesitaremos mascarillas, tapones y auriculares para el ruido, calzado de suela conductora (según qué caso con punteras metálicas), ropa de fibra natural, guantes antiestáticos y, por supuesto, gafas de protección. Así nos podremos proteger correctamente de la electricidad estática y de la exposición a sustancias nocivas.
En cuanto a la manipulación y almacenaje deberán tenerse en cuenta diversas normas como separar correctamente los materiales incompatibles entre ellos, no arrastrar los embalajes y moverlos con precaución, recoger inmediatamente cualquier material que caiga al suelo, manipular sólo las cantidades necesarias de sustancias y un largo etcétera.
También será muy importante que los operarios tengan formación en primeros auxilios por si, aun prevenidos, hubiera algún accidente. Asimismo la empresa debe contar con un protocolo en caso de incendio que todos los trabajadores deberán conocer para saber cómo evacuar la zona sin esperar a una orden directa e in situ de su superior.
Como veis, lo que algunos rápidamente consumimos por entretenimiento lleva un trabajo de prevención muy exhaustivo. Y lo que hemos plasmado en este post es solo la punta del iceberg. Por eso, compartimos documentación muy interesante sobre protocolos en la industria pirotécnica. Nosotros nos despedimos y os deseamos una feliz verbena (con mucha precaución) a quienes la celebréis.
Recomendaciones básicas en PRL Sector de la Pirotecnia - Fundación de la Comunidad Valenciana para la Prevención de Riesgos Laborales
Seguridad en Pirotecnia y Cartuchería - Fueyo editores
Prevención de Riesgos Laborales: Pirotecnia
